La cultura de ahorro en el Perú viene mostrando leves mejorías en lo que va del año, sobre todo si consideramos la preferencia de los usuarios por poseer una cuenta en una entidad financiera. Sin embargo, el mismo estudio también menciona que 2 de cada 10 peruanos (18.8%) todavía ahorra fuera del sistema financiero, según reporta el INEI.
Según datos compartidos por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), al segundo trimestre del 2023, se tiene que el 58.6% de la población mayor de edad tiene una cuenta en el sistema financiero. Esta cifra configura un aumento de 4.7 puntos porcentuales respecto del mismo periodo del 2022.
Carlos Albán, gerente regional centro de Caja Piura, explica que los motivos principales para que algunas personas no se animen a ahorrar en una entidad financiera es el desconocimiento del sistema y la desconfianza que sienten. No saben con precisión que su dinero está mejor protegido en el sistema y tienen malas experiencias que han vivido familiares o amigos.
Para el especialista, algunos de los obstáculos de los peruanos para no poder ahorrar son los gastos altos y los desembolsos no presupuestados, los mismos que afectan el bolsillo de las personas. Adicionalmente, menciona que la cultura del ahorro en el Perú aún está en vías de crecimiento.
Tipos de cuenta
Dentro de los modos de ahorros, surgen 2 grandes grupos: el corriente y el de plazo fijo. El ahorro corriente implica tener libre disponibilidad de dinero en la cuenta, aunque la tasa que paga la entidad financiera puede ser mínima o nula. En cuanto al ahorro a plazo fijo, requiere conocer dos puntos importantes: la tasa de interés que se obtiene por el dinero depositado es elevada y va en función al tiempo de apertura de dicha cuenta.
En cambio, el Ahorro a Plazo Fijo Tradicional, permite obtener una tasa de interés mayor al realizarse más depósitos. Se puede hacer retiros parciales según las condiciones establecidas y se puede disponer de los intereses adquiridos en cualquier momento, además de solicitar un crédito, dejando en garantía la propia cuenta de ahorros.